En el yoga, trabajamos a través de diferentes técnicas, las cuales cumplen funciones específicas. Entre ellas encontramos las asanas. A continuación veremos que son y para que se utilizan.
Asanas
Asana significa postura en idioma sánscrito, permanecer, estar establecido en una posición determinada.
Estas posturas que practicamos cuando realizamos yoga tienen un valor más allá del físico. Muchas personas creen que las asanas son ejercicio físico, pero la realidad es que al realizar asanas lo que buscamos es conseguir estabilidad en la postura.
Cuando realizamos gimnasia buscamos el efecto muscular y hacemos los ejercicios con rapidez, tomamos una actitud competitiva. En cambio, cuando practicamos asanas en el yoga adoptamos una postura y la mantenemos, dando importancia a la acción profunda que ejerce la misma. Cuando realizamos asanas lo importante es la intención con que la hacemos. Tomamos una actitud introspectiva donde nuestra intención es la de ir hacia adentro. Por supuesto que la práctica continua de asanas nos otorga flexibilidad, ligereza, fuerza, resistencia y salud, pero también nos aportan mucho más ya que también al realizar estas posturas actuamos sobre las glándulas restaurando su secreción normal y ejercemos masajes sobre determinadas partes del cuerpo.
Las Asanas llevan al cuerpo a un estado de estabilidad.
Según los Yoga Sutras de Patañjali (II.46)
"Asana es firmeza corporal perfecta, estabilidad de inteligencia y benevolencia de espíritu".
Asana es por un lado, es la capacidad de permanecer confortablemente en la postura y por otro, la capacidad de permanecer con firmeza.
Una postura firme y agradable produce equilibrio mental y evita la inconstancia de la mente, crea un cuerpo fuerte y elástico, reduce el cansancio y calma los nervios. Mediante las asanas se estimula la circulación, se desbloquean articulaciones, se masajean los órganos internos y se controla la mente, entre otras cosas.
El cuerpo es un vehículo que se conquista mediante las asanas. Es un instrumento para la liberación espiritual, ya que las necesidades del cuerpo son necesidades del espíritu que vive a través de él.
Dependiendo del tipo de asana o las secuencias (grupos de posturas) como se paractiquen las mismas, darán difentes resultados.
Cuando realizamos gimnasia buscamos el efecto muscular y hacemos los ejercicios con rapidez, tomamos una actitud competitiva. En cambio, cuando practicamos asanas en el yoga adoptamos una postura y la mantenemos, dando importancia a la acción profunda que ejerce la misma. Cuando realizamos asanas lo importante es la intención con que la hacemos. Tomamos una actitud introspectiva donde nuestra intención es la de ir hacia adentro. Por supuesto que la práctica continua de asanas nos otorga flexibilidad, ligereza, fuerza, resistencia y salud, pero también nos aportan mucho más ya que también al realizar estas posturas actuamos sobre las glándulas restaurando su secreción normal y ejercemos masajes sobre determinadas partes del cuerpo.
Las Asanas llevan al cuerpo a un estado de estabilidad.
Según los Yoga Sutras de Patañjali (II.46)
"Asana es firmeza corporal perfecta, estabilidad de inteligencia y benevolencia de espíritu".
Asana es por un lado, es la capacidad de permanecer confortablemente en la postura y por otro, la capacidad de permanecer con firmeza.
Una postura firme y agradable produce equilibrio mental y evita la inconstancia de la mente, crea un cuerpo fuerte y elástico, reduce el cansancio y calma los nervios. Mediante las asanas se estimula la circulación, se desbloquean articulaciones, se masajean los órganos internos y se controla la mente, entre otras cosas.
El cuerpo es un vehículo que se conquista mediante las asanas. Es un instrumento para la liberación espiritual, ya que las necesidades del cuerpo son necesidades del espíritu que vive a través de él.
Dependiendo del tipo de asana o las secuencias (grupos de posturas) como se paractiquen las mismas, darán difentes resultados.
Grupos posturales de asanas y su efecto
Flexiones hacia adelante: Ejercen un profundo masaje en la región abdominal, mejorando el funcionamiento de los órganos y vísceras de la cavidad abdominal. Estiran y revitalizan los músculos posteriores del cuerpo; dotan de elasticidad a la espina dorsal, desbloquean y sedan el sistema nervioso autónomo; favorecen el recogimiento y el equilibrio emocional. Previenen contra trastornos digestivos, gastriris, estreñimiento, escoliosis, ansiedad e insomnio. Ejemplos: Postura de la pinza y postura del triángulo invertido.
Anteflexiones: Estas posturas estiran y revitalizan todos los músculos anteriores del cuerpo y ejercen un profundo masaje sobre la región lumbar, mejorando el funcionamiento de las glándulas suprarrenales y de los riñones. Dotan de flexibilidad a la columna vertebral hacia atrás y tonifican y fortalecen los músculos pectorales y abdominales. Potencian el funcionamiento cerebral, tonifican todos los pares de nervios espinales y la médula espinal. Activan los músculos respiratorios, favorecen la glándula tiroides, previenen contra el asma, algunos trastornos del aparato digestivo, la escoliosis,la psicastenia y el estrés. Invitan al sentimiento de expansión. Ejemplos: Postura de la cobra, postura del masaje renal y postura del camello.
Flexiones laterales: Estas asanas dotan de elasticidad a la espina dorsal hacia los lados, estiran y revitalizan los músculos y nervios intercostales, ejercen un beneficioso masaje sobre el páncreas, el hígado y el bazo; benefician los nervios espinales y los músculos deltoides, trapecio, hombros y brazo; estimulan la musculatura del cuello y los músculos de las extremidades inferiores; activan la acción cardíaca y mejoran el riego sanguíneo a todo el cuerpo. En el niño favorecen el crecimiento y aumentan el apetito. Estas posturas previenen contra las tensiones generales del tronco, las contracturas y crispaciones, distendiendo, y produciendo una sensación de bienestar. Ejemplos: Postura de la media luna y postura sobre el costado.
Torsiones: Las posturas de este grupo ejercen un estiramiento muy pronunciado sobre todos los músculos y nervios del tronco, mejorando el riego sanguíneo a los mismos. También sirven para tonificar los músculos y nervios de las piernas y el cuello. Son posturas excelentes para favorecer la espína dorsal y prevenir la escoliosis, el lumbago, la ciática y trastornos afines. Procuran un profundo masaje a todas las vísceras abdominales y favorecen en las mujeres los ovarios y en los hombres la próstata. Previenen la indigestión, el colon irritable, las hemorroides y el estreñimiento. Activan el sistema circulaorio y aumentan la fortaleza corporal. Ejemplos: Media postura de Matyendra y postura de torsión.
Inversiones: Estas posturas favorecen enormemente al cerebro, al aportarle gran cantidad de sangre. Estimulan la acción de los órganos sensoriales y regulan el funcionamiento de la glándula tiroides. Fortalecen mucho la espína dorsal y en especial las vertebras cervicales. Vigorizan los músculos de los brazos, los hombros y el cuello. Descongestionan las venas de las piernas, descansándolas y previniendo contra várices. Estimulan la acción cardíaca y aumentan la capacidad de la memoria, la concentración y la atención. Previenen los catarros nasales,la hipotensión, la psicastenia, la depresión, la dispersión mental y la falta de concentración. Tonifican y vigorizan el cuerpo en general. Ejemplos: Postura de la vela y postura sobre la cabeza.
Abdominales: Estas posiciones inciden sobre el abdomen y favorecen sus órganos y su musculatura; la mayoría de ellas también inciden muy beneficamente sobre las regiones coccígea, sacra y lumbar. Combaten la adiposidad abdominal, el estreñimiento y algunos trastornos menores del aparato digestivo. Ejemplos: Postura del nervio vajroli y la postura del ángulo recto.
Acción general sobre el cuerpo: Este grupo de posturas estimulan todo el organismo y su acción se generaliza a todos los músculos y nervios. Son posturas que desarrollan más esfuerzo cardíaco y que aumentan la capacidad de resistencia, acción y rendimiento del cuerpo. Mejoran el riego sanguíneo en general. Ejemplos: La postura del ave y la postura del pavo.
Meditación: Son posturas para la practica de la meditación. Son las más apropiadas para estabilizar el cuerpo e inmovilizar y mantener la espína dorsal y la cabeza erguidas. En esas posturas se puede utilizar un cojín bajo las nalgas lo que permite estar más cómodamente erguido. A medida que se va ejercitando se logra mantener la inmovilidad cada vez mas tiempo. Ejemplos: La postura del loto, la postura del sastre y la postura perfecta.
Anteflexiones: Estas posturas estiran y revitalizan todos los músculos anteriores del cuerpo y ejercen un profundo masaje sobre la región lumbar, mejorando el funcionamiento de las glándulas suprarrenales y de los riñones. Dotan de flexibilidad a la columna vertebral hacia atrás y tonifican y fortalecen los músculos pectorales y abdominales. Potencian el funcionamiento cerebral, tonifican todos los pares de nervios espinales y la médula espinal. Activan los músculos respiratorios, favorecen la glándula tiroides, previenen contra el asma, algunos trastornos del aparato digestivo, la escoliosis,la psicastenia y el estrés. Invitan al sentimiento de expansión. Ejemplos: Postura de la cobra, postura del masaje renal y postura del camello.
Flexiones laterales: Estas asanas dotan de elasticidad a la espina dorsal hacia los lados, estiran y revitalizan los músculos y nervios intercostales, ejercen un beneficioso masaje sobre el páncreas, el hígado y el bazo; benefician los nervios espinales y los músculos deltoides, trapecio, hombros y brazo; estimulan la musculatura del cuello y los músculos de las extremidades inferiores; activan la acción cardíaca y mejoran el riego sanguíneo a todo el cuerpo. En el niño favorecen el crecimiento y aumentan el apetito. Estas posturas previenen contra las tensiones generales del tronco, las contracturas y crispaciones, distendiendo, y produciendo una sensación de bienestar. Ejemplos: Postura de la media luna y postura sobre el costado.
Torsiones: Las posturas de este grupo ejercen un estiramiento muy pronunciado sobre todos los músculos y nervios del tronco, mejorando el riego sanguíneo a los mismos. También sirven para tonificar los músculos y nervios de las piernas y el cuello. Son posturas excelentes para favorecer la espína dorsal y prevenir la escoliosis, el lumbago, la ciática y trastornos afines. Procuran un profundo masaje a todas las vísceras abdominales y favorecen en las mujeres los ovarios y en los hombres la próstata. Previenen la indigestión, el colon irritable, las hemorroides y el estreñimiento. Activan el sistema circulaorio y aumentan la fortaleza corporal. Ejemplos: Media postura de Matyendra y postura de torsión.
Inversiones: Estas posturas favorecen enormemente al cerebro, al aportarle gran cantidad de sangre. Estimulan la acción de los órganos sensoriales y regulan el funcionamiento de la glándula tiroides. Fortalecen mucho la espína dorsal y en especial las vertebras cervicales. Vigorizan los músculos de los brazos, los hombros y el cuello. Descongestionan las venas de las piernas, descansándolas y previniendo contra várices. Estimulan la acción cardíaca y aumentan la capacidad de la memoria, la concentración y la atención. Previenen los catarros nasales,la hipotensión, la psicastenia, la depresión, la dispersión mental y la falta de concentración. Tonifican y vigorizan el cuerpo en general. Ejemplos: Postura de la vela y postura sobre la cabeza.
Abdominales: Estas posiciones inciden sobre el abdomen y favorecen sus órganos y su musculatura; la mayoría de ellas también inciden muy beneficamente sobre las regiones coccígea, sacra y lumbar. Combaten la adiposidad abdominal, el estreñimiento y algunos trastornos menores del aparato digestivo. Ejemplos: Postura del nervio vajroli y la postura del ángulo recto.
Acción general sobre el cuerpo: Este grupo de posturas estimulan todo el organismo y su acción se generaliza a todos los músculos y nervios. Son posturas que desarrollan más esfuerzo cardíaco y que aumentan la capacidad de resistencia, acción y rendimiento del cuerpo. Mejoran el riego sanguíneo en general. Ejemplos: La postura del ave y la postura del pavo.
Meditación: Son posturas para la practica de la meditación. Son las más apropiadas para estabilizar el cuerpo e inmovilizar y mantener la espína dorsal y la cabeza erguidas. En esas posturas se puede utilizar un cojín bajo las nalgas lo que permite estar más cómodamente erguido. A medida que se va ejercitando se logra mantener la inmovilidad cada vez mas tiempo. Ejemplos: La postura del loto, la postura del sastre y la postura perfecta.
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